martes, 6 de julio de 2010

el libreto opositor de hoy y mañana en el congreso.

En una edición del programa radial "conectados en la Radio" que conduce GerardoFernandez y amenizado diariamente por las entradas de una compañera cuyo apelativo es "Gladys", fue entrevistado Carlos Raimundi que habló in extenso sobre política nacional.
Cuando llegó al punto ley de medios Raimundi dijo cosas más que interesantes, ideas que sobrevuelan sobre nuestras cabezas.
Alega, por ejemplo:


"se quiebra una estructura monopólica llenando de sociedad civil el lugar dejado por el monopolio y no construyendo otro monopolio (privado o estatal)."

"los conglomerados van a luchar por no perder los negocios, pero mucho más van a luchar por mantener el lugar en la cúspide de la formacion del sentido en la sociedad"

"la democracia o el pueblo poco importan, esas corporaciones tratan de dejar en claro que ellos son el poder y no me van a dejarse derrotar asi no más
"

"la oposición politica no la ejerce las fuerzas políticas de oposición al gobierno, sino la ejerce el poder desnudo, y ante quien sea. L
os políticos se limitan a hacer play back, mueven los labios recitando un libreto escrito fuera de la política."

"cuando un diario saca una denuncia de corrupción, se hacen 2 colas de políticos, menesterosos de apoyo mediático, una redacta una demanda para ser presentada en Comodoro Py y la otra un pedido de informes o una interpelación o las dos cosas, pero la agenda esta formada desde fuera de la politica."


Algo de esto hablaba el turco Jorge Yoma
-entre humoradas y largos discursos- en la sesión de diputados sobre el Consejo de la Magistratura

Sra. Presidenta (Fadel).- Tiene la palabra el señor diputado por La Rioja.

Sr. Yoma.- Señora presidenta: una vez más estamos convocados para tratar un tema de enorme envergadura institucional, pero con un objetivo político menor.

Venimos escuchando desde el 28 de junio del año pasado que el cambio en la mayoría parlamentaria iba a redundar en una mejora en la calidad institucional de la Argentina, que íbamos a cambiar, que estábamos obligados a trabajar en un mayor consenso, que ése era el mandato de la sociedad y que las leyes que iba a producir el Parlamento iban a ser las que formaban parte de la agenda de la sociedad y no las leyes impuestas –entre comillas‑ por el oficialismo.

Pero no ocurrió ni una cosa ni la otra. Cada una de las iniciativas que se han votado por la imposición de las mayorías circunstanciales surgidas en la elección del 28 de junio han generado una expectativa y un titular durante un par de días en los diarios y nunca más se supo de ellas.

Me pregunto qué pasó con la reforma de la ley del cheque, votada con una minoría absolutamente inconstitucional y que generó largos debates en este Parlamento. Me pregunto qué pasó con la utilización de las reservas para el famoso pago de la deuda externa, tema que durante cuatro meses tuvo en vilo a la opinión pública. También me pregunto qué pasó con el rechazo por simple mayoría al veto de la ley de partidos políticos, qué pasó con la reforma de la ley que reglamenta los decretos de necesidad y urgencia, o qué pasó con cada una de las expectativas que se han ido generando en la opinión pública. Lo único que lograron fue un par de títulos en los diarios, ese efímero y pequeño objetivo de leer en los diarios del día siguiente un título que diga: “Triunfo opositor en la Cámara de Diputados.”

¿Pero qué mejora en la calidad institucional trajo aparejada esa promesa electoral que hicieron? Lo único que yo veo –lo digo con mucho respeto y humildad‑ es un nuevo intento de degradar la calidad institucional en la Argentina para obtener un triunfo chiquito, como es una votación en una de las cámaras del Congreso.

Señora presidenta: ¿cómo se inscribe entonces esta reforma a la ley del Consejo de la Magistratura que se nos propone en la reglamentación del artículo 114 de la Constitución Nacional? Es una ley que requiere del consenso de la mayoría absoluta de cada Cámara y también un consenso político, máxime si se trata de una iniciativa de los bloques opositores al partido de gobierno. ¿Por qué? Porque en nuestro sistema institucional hay un colegislador que es el Poder Ejecutivo, y el mandato popular que tuvieron el 28 de junio no fue que la oposición consensuara para producir daños políticos al gobierno. El mandato popular del 28 de junio fue que el oficialismo y la oposición buscaran un consenso en todos aquellos temas que tuvieran que ver con la mejora de la calidad institucional.

Pero acá se insiste en votar cualquier cosa en contra de la letra, del espíritu y de los antecedentes de las leyes y de la Constitución Nacional con tal de obtener un título en los diarios del día siguiente que diga: “Triunfo de la oposición”. Eso es lo que quieren conseguir, aunque las iniciativas votadas nunca lleguen a ser leyes, ya sea porque duermen en el Senado –como pasó con todas las iniciativas que salieron de esta Cámara‑ o porque duermen en esta Cámara de Diputados, como pasó con la reforma de la ley del cheque. Se aprobó por mayoría simple la modificación de una asignación específica de un impuesto coparticipable, por lo que dormirá para siempre el sueño de los justos en esta Cámara de Diputados.

Lo mismo ocurrió con cada una de las iniciativas con las cuales pretendieron imponer una agenda sin darse cuenta de que lo que la sociedad está pidiendo es que consensúen con el oficialismo, que es el que tiene la función de administrar el país, leyes que tienen que ver con la mejora en la calidad institucional y en la calidad de vida de la gente.

El mismo voto popular que el 28 de junio eligió a la oposición para conformar un nuevo Congreso, eligió al peronismo y a la presidenta Kirchner para administrar la Argentina. Y si no buscamos el consenso del partido de gobierno, las leyes requieren los dos tercios y los dos tercios no existen, no los tienen, con lo cual están más obligados que nosotros a buscar el consenso porque además se comprometieron ante la opinión pública con ese discurso...


Y continùa




3 comentarios:

Anyuletta dijo...

Ahora que la estrategia de ir por derecha no dio los frutos esperados, te corren por izquierda. Me gustaría ver a alguno de la oposición proponiendo aumento de sueldo del 82 por ciento en las empresas privadas. Je.

PD.: Hoy si que le dio al teclado en el artículo de la Noble, eh?

OMIX dijo...

Hola Anyu...
Si que le di al teclado, pero me la agarré mal con el Goñi ese, hay que ser más mesurado.

OMIX dijo...
Este comentario ha sido eliminado por el autor.